top of page
  • Black Facebook Icon
  • Black Instagram Icon
  • Google+ - Black Circle
Buscar

El “Por Qué” Es Más Importante que el “Cómo” - Reto Mes De Julio

  • Laura Bobadilla
  • 3 jul 2019
  • 5 Min. de lectura

“Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad.

Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico,

procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura.

Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle; porque había de pasar por allí.

Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa.

Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso.

Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador.

Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado.

Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham.

Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido. “ Marcos 10:45

“Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.” 1 Timoteo 1:5

En la Biblia encontramos poca información acerca del cómo vivió Jesús. Sin embargo, estos versículos describen el propósito de la vida de Jesús.

La vida de Jesús fue definida no tanto por Su estilo de vida, sino por Su propósito de vida. Es decir, que no fue caracterizada por lujos o comodidades personales, fue definida por lo que Él hizo y por el propósito y la razón por los cuales hizo lo que hizo.

“Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos; más el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza.” Lucas 9:58

La mayoría de los recursos humanos de hoy en día se destinan para acondicionar nuestro estilo de vida, la mayoría del presupuesto familiar es destinado a nuestra condición de vida y, esto, no es malo, siempre y cuando no llegue a ser la razón de nuestra existencia y tampoco que estas cosas definan nuestras vidas.

Mi vida no debe ser definida por el “cómo” vivo, sino por el “por qué” vivo; importa muy poco el “cómo” vivo, si mi vida no tiene un “por qué”.

El significado de mi vida no debe ser determinado por mi nivel de comodidad, sino por el por qué poseo las cosas que tengo en mi vida.

El contexto de mi vida es más importante que la comodidad de mi vida.

Muchas veces el “por qué” se convierte en el “cómo”.

¿Para qué existo? ¿Por qué sigo viviendo? ¿Qué me motiva? ¿Qué bien genero? ¿A quién le beneficio? ¿A qué causa pertenezco? ¿Qué tan diferente será el mundo por mi breve presencia en él?

“Por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón,” Hebreos 11:24

La condición de la vida de Moisés, el cómo de la vida de Moisés no fue importante lo que importaba era él por qué estaba viviendo

“Dijo luego a sus discípulos: Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por el cuerpo, qué vestiréis.

La vida es más que la comida, y el cuerpo que el vestido.” Lucas 12:22 – 23

Lo que impide que la mayoría de nosotros alcance una medida de simple significado, no de grandeza, o lo que impide que nuestras vidas cuenten más que el simple hecho de sobrevivir, es el afán que tenemos por nuestras vidas, por preocuparnos y enfocarnos más en el cómo estamos viviendo en lugar de enfocarnos en el por qué estamos viviendo.

No se trata de no poder hacer lo que otros han hecho, sino que estamos tan consumidos con el asunto de cómo estamos viviendo que no nos detenernos a pensar en el por qué estamos viviendo.

Asegúrate de que te estas concentrando en el “por qué” de tu vida y no tanto en el “cómo” la estoy viviendo.

  1. ¿Qué hice para mejorar de manera eterna, permanente o significante la vida de alguien que no es miembro de mi familia? Mateo 5:47

  2. ¿Tomé alguna acción, dije algo, o rehúse decir algo, dar un consejo, enviar una carta, recado, correo electrónico, compartir algo con otro que reflejaría la imagen de Cristo o que me hiciera parecer más a Cristo y menos a mismo? Romanos 8:28. El bien de este pasaje no es que todo te va a salir bien es que todas las cosas me ayudan a ser hecho conforme a la Imagen de Jesucristo.Todo lo que Dios hace en mi vida, tiene el propósito de parecerme más a Él y menos a mi mismo.

  3. ¿Hice algo para contribuir a mi propio crecimiento espiritual y/o glorificar a Dios? 2 Pedro 3:18 ¿Me he detenido a comparar mi crecimiento espiritual, nivel de madurez espiritual, mi nivel de cercanía con Dios?

  4. ¿Tomé alguna decisión desinteresada, algo que me costara en términos de comodidad o ganancia personal o en términos de mi imagen para obedecer algún principio bíblico? Mateo 6:34 El deseo de vivir cómodamente pero sin propósito es la epidemia del siglo XXI. La vida es demasiado corta, preciosa y costosa como para haberla vivido y muerto sin saber por qué uno vive. Y la gran tragedia es que la gran mayoría de los cristianos muere sin haber descubierto y llevar acabo el propósito de Dios en sus vidas.

  5. ¿Paso suficiente tiempo leyendo y meditando en la Biblia para descubrir al menos una verdad que se aplique a mi vida en ese mismo momento? Salmos 1:1-2. El cristiano que no pasa tiempo diario en la Palabra de Dios no está viviendo una vida cristiana completa.

  6. ¿Oro con tal convencimiento de que Dios me escucha y de que contestará mi petición? Filipenses 4:6-7

  7. ¿Vivo de tal manera que quiero que la persona que más amo siga mi ejemplo en todo lo que hago? Juan 13:15

Si no tenemos cuidado viviremos consumidos en el cómo estamos viviendo, que nos olvidaremos del por qué lo estamos haciendo.

Cada vida, no importa lo insignificante que parezca, es demasiado valiosa como para que se pierda.

Tener una razón de vivir, te enseñara como vivir. Y si tienes razón de vivir importará muy poco cómo estás viviendo.

El propósito de la vida no es cuanto puedo acumular, ni cuanto puedo dejar, sino es cuanto puedo repartir mientras viva.

¿Sabes por qué estás viviendo? ¿Te has detenido a definir y a determinar “por esto Dios me tiene aquí”?

No pases una hora más sin tener una clara visión, un claro entendimiento del propósito verdadero, del propósito de Dios para tu vida.

Él “por qué” es más importante que el “cómo”.


 
 
 

Comentarios


TRANSFORMADAS 2019

bottom of page